miércoles, 22 de febrero de 2012

Winter is coming still here

Tengo el deshumificador conectado las 24 horas del día, de las cuales una gran parte también con el dispositivo generador de aire caliente activado. Para dormir en mi habitación, enciendo la estufa como una hora antes y la dejo puesta toda la noche. Además siempre estoy con la bata puesta, ya esté vestido con ropa de calle, ya esté con pijama y zapatillas (y calcetines por encima del pantalón, por supuesto).

Pero mis pies siguen congelándose en esta casa.

Al principio no se notaba mucho. Aún así entre mis padres y yo fuimos tomando precauciones (sobre todo mis padres, que si por mí fuera, ahora mismo estaría probablemente muerto por hipotermia).
Fueron instalados burletes en las ventanas y en la puerta de la entrada. Y mi madre se quedó muy a gusto regándome el piso con alfombras (si bien es verdad que no todas las que ella hubiera querido).
Pero el frío permanecía.
También tapamos un respiradero en la cocina, a mi juicio innecesario ya que la campana extractora funciona a las mil maravillas y soy muy cuidadoso de no dejarme nunca la llave del gas abierta.
Pero el frío permanecía.
No hace ni dos semanas que mi padre descubrió otro lugar por el que el calor se las ingenia para salir: El desagüe del fregadero. Ahora siempre tengo el tapón puesto, y se ha notado bastante, la verdad.
Pero aún así, a ratos, sigo teniendo frío.

Maldito invierno. ¿No te acabarás nunca?. Para este año me voy a ir a Ferrol en Octubre, me voy a meter en la cama, y no pienso salir de allí hasta Mayo.

1 comentario:

  1. El puto... desagüe??? Flipo. No sé por qué nunca hablamos tú y yo del tema pies frios. Desde hace pocos meses se me congelan ahora sí ahora también, mi teoría es que es una enfermedad terminal. Igual es por no poner el tapón de la bañera... ahora estoy más tranquila!

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